Por Williams Ortiz
El Gobierno de la República (s.a.) establece como un
objetivo fundamental de la Reforma Educativa “responder a una exigencia social
para fortalecer a la educación pública, laica y gratuita”, actualmente esta
exigencia social responde a la necesidad de la educación socioemocional como
parte del sistema educativo mexicano, aspecto incluido en este desde el 2014.
En este trabajo se presenta un
análisis del programa “Construye T”, el cual representa la intención del
gobierno mexicano de incluir la educación socioemocional en el nuevo modelo
educativo. Dicho análisis se realiza para dar propuestas de mejora que puedan
potenciar las cualidades y características del programa, que lleve a una
aplicación y desarrollo eficiente y efectivo de este. Estas propuestas giran,
principalmente, en torno a los docentes, aquellos encargados de implementar el
programa en las escuelas de educación básica y media superior.
El programa se compone de habilidades socioemocionales,
tales como: autoconocimiento, autorregulación, conciencia social, colaboración,
toma de decisiones responsables y perseverancia. La Secretaría de Educación
Pública pone a disposición del docente guías de implementación y de
actividades, talleres virtuales y vídeos sobre el tema. En cada uno de los
semestres (educación media superior) se trabaja una categoría que agrupa
habilidades socioemocionales.
Aunque las
guías y las fichas de actividades cuentan con una amplia variedad, no se
prestan a una verdadera profundización y reflexión sobre lo que dicha habilidad
trabajada representa. Pero el tema principal es que los docentes encargados de
implementar estas habilidades son capacitados de forma superficial (refiriendo
que no se realiza un estudio extensivo sobre esto) y no hay verificación de que
estos docentes manejan el conjunto de habilidades socioemocionales que componen
el programa más allá de la teoría, es decir, se logra más un aprendizaje
conceptual que significativo, quedando solo como “aprender a conocer”, y quizá
“aprender a hacer”, sin embargo se requiere también alcanzar los dos últimos
pilares de la educación: “aprender a ser y convivir”.
Existe entonces la necesidad de
desarrollar primeramente en los docentes habilidades socioemocionales que
puedan ser reflejadas en el aula y con esto poder responder a las exigencias
del programa y, prioritariamente, a las necesidades de los alumnos
correspondientes. Pocos docentes están habilitados para la instrucción de las
habilidades socioemocionales.
Comentarios
Publicar un comentario